Encontrado cuerpo de mujer se basa en cifras reales de violencia familiar y feminicidios registradas en varias colonias de la zona metropolitana de la Ciudad de México en los años 2020 y 2021, durante la pandemia de la COVID-19. La magnitud de los datos pone de manifiesto que el exhorto “¡Quédate en casa!” confinó a gran parte de la población mundial en un espacio poco seguro: su propio hogar.

En la investigación previa al diseño de la pieza advertí que en algunas notas periodísticas se da a conocer el nombre de las víctimas, pero en la mayoría se les refiere con la frase: “otra muerta más”. Por ejemplo, en un artículo de El País, edición en línea para México, publicado en marzo de 2021, se lee: “El nombre de algunas [mujeres] ni siquiera ha trascendido porque ha sido imposible reconocerlas, las últimas palabras que los medios publicaron sobre ellas fueron: ‘Encontrado cuerpo de mujer’”.

La visualización de la obra contempla que mi piel se funda con una proyección. La acción se dirige al gesto, al trazo, a la correlación de los elementos espaciales y a la construcción metalingüística de capas de significado: video sobre cuerpo, trazo sobre video, acción expresiva y conceptual sobre el medio digital.

Con la mirada dirigida hacia el valle de México, marqué los puntos geográficos donde han ocurrido casos de violencia familiar y feminicidio, documentados por la prensa. La acción propone la toma de posición frente a dos aspectos: la violencia familiar y el papel de la pareja sentimental en este fenómeno.